En la noche de Navidad, un niño espera en su cama, atento al sonido de cascabeles que anuncia la llegada del trineo de Santa Claus. Y efectivamente lo sorprende al escuchar los resoplidos de vapor y el chirriar de metales de un tren que se ha detenido frente a su casa para invitarlo a subir al expreso. A la señal del conductor, el niño sube abordo e inicia un viaje maravilloso al Polo Norte, en donde le será entregado un regalo muy especial.
El texto y las mágicas ilustraciones de Chris Van Allsburg recrean una Navidad en la que los sueños se pueden cumplir.
La película “El Expreso Polar”
Para festejar el clima de este mes puede compartir con “otros” la película del director Robert Zemeckis inspirada y basada en el libro de Chris Van Allsburg. El efecto, la animación y la técnica utilizada en la película -denominada “captura de la actuación”- permiten que la actuación en vivo de los actores pueda ser pasada, con sus emociones y movimientos, a los personajes digitales y de esta manera respetar el tono de las imágenes hiperrealista realizadas originalmente en el libro de Van Allsburg.
Me agradan los libros que se mantienen fieles a la esencia misma del arte, o sea, que brindan a los niños un conocimiento intuitivo y directo de la belleza sencilla, susceptible de ser percibida inmediatamente y que produce en sus almas una vibración que les durará de por vida. Paul Hazard
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario